Caminaba, como nunca lo hice. La pierna mala con la que me vio nacer este mundo me dejaba en medio camino siempre… siempre pensé que no son las luces de la ciudad; las almas... las que me llaman, los sonidos que me reclaman, el pensamiento perdido, el valor dormido de frió paceño o hambre de días tibios.
De frente son sólo los caminos desiertos
¿Descalzo? El frió conmueve hasta lo más perdido de las paredes que se parten, que se destruyen por el abandono, por el calor…
Sobre mis recuerdos no tengo mucho que decir. Que los he perdido en el fuego; que no tienen nombre; que las charcas secas; lluvia de invierno- en el Buen Invierno; trigo desparramado sobre los colores sin forma…
Recuerdos… tibios desparramados en la espalda de mujeres que no tienen color en la piel, mujeres pálidas; mujerteres…
Tardíos silencios
A la sombra de lo indefinible
De los días no recuerdo nada más que
Lo indefinido, lo impronunciable.
Lo indefinido, lo impronunciable.
6 comentarios:
me gusta como te expresas.
Y así es
de tantos días
aveces solo queda
un silencio
o quizás
un vago sonido...
Gracias por tus bellas letras
Isaac
Lo indefinible.. lo impronunciable..
Lo inefable...
Al final..
lo más real.
besos
(hermosas palabras.. pintadas de gris melancolia pero que prometen colores de amanecer..)
Polux...
cuanta melancolía...
Sigue escribiendo asi, siempre!
Mil gracias.
Beso.
El texto me habla de un ser coditiano ser que quiere matar lo mundano. Quiere rearmar al mundo para poder armarse, pues esta hecho pedazos... Ánimos amigo, he vuelto a las andadas... jaja... Slds.
Dios está a de mi lado
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